jueves, 30 de junio de 2011

POBREZA

¿Quién vive de verdad en la pobreza absoluta?


Mientras el 40% más pobre de la población cuenta con menos del 4% de la renta total, el 15% más rico disfruta del 80%
La crisis económica ha favorecido el aumento del número de personas en paro, así como las bolsas de pobreza registradas en las ciudades, el denominado Cuarto Mundo. Pero a pesar de la tragedia que guarda el concepto de pobreza en los países desarrollados, va más allá en el mundo en desarrollo. Vivir en la pobreza absoluta supone para millones de personas carecer de los medios necesarios para cubrir necesidades básicas como comer, beber agua o dormir bajo un techo. Incluso se carece de un entorno que, en ausencia de medios propios, provea de la ayuda necesaria. Uno de los motivos fundamentales de pobreza en el mundo es la desigual distribución de la renta. La población más pobre accede a una pequeña proporción de la misma, frente al elevado porcentaje que cae en manos de los ciudadanos más ricos, que son minoría.

• Por AZUCENA GARCÍA
• 24 de junio de 2011


El concepto de pobreza encierra, ante todo, privación. Las personas consideradas pobres lo son porque no pueden cubrir unas necesidades básicas. Carecen de ingresos suficientes, alimentos, agua potable, un techo, atención sanitaria o acceso a la educación. La pobreza es un círculo que de momento no cesa, ya que el aumento de la población ha supuesto un incremento del número de pobres.
La pobreza no implica solo unos ingresos económicos insuficientes, sino la dificultad de acceder a atención sanitaria o educación
El primer Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM) pretende erradicar la pobreza extrema y el hambre con el fin de garantizar a todas las personas unas condiciones de vida mínimas, pero la pobreza es un concepto multidimensional. Sin olvidar que en el Norte cada vez son más quienes carecen de ingresos suficientes para alcanzar una calidad de vida digna, la realidad enfoca al Sur cuando se habla de pobreza, ya que, recuerda Naciones Unidas, "una sola carencia podría no suponer que se viva en la pobreza".

Pobreza multidimensional

El Informe de Desarrollo Humano de 2010 incluyó un nuevo indicador: el Índice de Pobreza Multidimensional (IPM). Este revela privaciones en tres ámbitos: salud, educación y nivel de vida. Según sus estimaciones, unos 1.750 millones de personas viven en situación de pobreza multidimensional, tras analizar la información disponible de un total de 104 países.
En el plano económico, 1.440 millones de personas viven con menos de 1,25 dólares al día. La distribución de la renta es una de las principales causas de esta situación. Mientras el 40% más pobre de la población disfruta de un mínimo 4% de la renta total, el 15% más rico acumula el 80%. Además, "al menos un tercio de los indicadores reflejan graves privaciones en salud, educación o nivel de vida", recalca el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), que mide el Índice de Desarrollo Humano.
Todos estos indicadores son fundamentales, ya que incluso se establece una distinción entre la pobreza multidimensional y de ingresos. Algunas cifras son tan dispares como las de Etiopía, donde el IPM es del 90 mientras que el índice de personas que sobreviven con menos de 1,25 dólares al día es de 39, o Mauritania, con un IPM de 62, frente a un índice de 21 si se analizan los ingresos. Por el contrario, en Tanzania el IPM alcanza una cifra de 65, mientras que el nivel de ingresos consigue un indicador de 89.
Países con mayores tasas de pobreza
De acuerdo con el Índice de Pobreza Multidimensional, los países que registran un desarrollo humano muy alto o alto alcanzan un índice de pobreza mínimo, frente a las regiones de desarollo humano medio y bajo. En un margen entre 0 y 1, donde 0 revela el menor índice de pobreza multidimensional y 1, el máximo, en el tercer grupo destacan Gabón (0,161), Bolivia (0,175), Namibia (0,187), Honduras (0,160), Nicaragua (0,211), India (0,296) y Camboya (0,263), entre otros. En el grupo de países de desarrollo humano bajo figuran Kenya (0,302), Bangladesh (0,291), Camerún (0,299), Yemen (0,283), Benin (0,412), Madagascar (0,413), Angola (0,452), Etiopía (0,582), Mali (0,564) o Níger (0,642).

Pobreza humana

El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) diseñó el modo de medir el conocido desarrollo humano y, a partir de él, definió la denominada pobreza humana. Esta se refiere a la privación de capacidades esenciales, como "vivir una vida larga, sana y creativa y disfrutar de un nivel decente de vida, libertad, dignidad, respeto por sí mismo y de los demás". La pobreza se entiende como la negación de oportunidades y opciones fundamentales del desarrollo humano.
No obstante, el avance en el estudio de la pobreza ha sustituido el Índice de Pobreza Humana, recogido en los informes anuales del PNUD desde 1997, por el Índice de Pobreza Multidimensional. El motivo es que el primero recurría a medias nacionales y no analizaba en detalle la situación de personas, familias y grandes grupos. "El IPM da solución a este punto débil, reflejando cuántas carencias simultáneas sufren las personas y a cuántas carencias se enfrentan de media", precisa el PNUD.
Nueva definición de pobreza

El Banco Mundial considera pobres a quienes viven con menos de 1,25 dólares al día, cifra que aumenta en 400 millones el número total que se estimaba
Se anima a tener esperanza, pero los datos son desesperanzadores. El Banco Mundial asegura que durante los últimos 25 años la pobreza "ha afectado más de lo previsto al mundo en desarrollo". Insiste en que se han logrado avances considerables, pero la reflexión anterior, si se hacen los cálculos, desvela que el censo de pobreza cuenta con 400 millones de personas más de lo que se pensaba.

• Por AZUCENA GARCÍA
• 17 de octubre de 2008

El nuevo baremo para considerar a una persona pobre establece que es aquélla que vive con menos de 1,25 dólares al día. Hasta ahora, la barrera se situaba en menos de un dólar diario, por lo que de acuerdo a las nuevas cifras, el número de personas pobres disminuyó de 1.900 millones en 1981 a 1.400 millones en 2005.
Ante estos datos, hoy se celebra el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, pero no hay ánimo para celebraciones. El lema elegido este año: "Una promesa no es nada". Porque "con promesas no se come, no se cura, no se protege a las personas que viven en situación de pobreza", recuerdan los organizadores de la Semana contra la Pobreza.

Ayuda insuficiente

La cumbre de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) se cerró con un compromiso. Los países participantes aportarán 16.000 millones de dólares para combatir la pobreza a pesar de que, según las estimaciones, serían necesarios alrededor de 150.000 millones de dólares al año hasta 2010.
Unos 75 millones más de personas pasarán hambre a consecuencia de la subida de los alimentos y del combustible
Una de cada cuatro personas es pobre. Conforman el grupo más vulnerable en todos los sentidos y, más aún, en el momento actual de crisis económica. La Alianza Española contra la Pobreza estima que 75 millones más de personas pasarán hambre a consecuencia de la subida de los alimentos y del combustible. "El costo de vida en el mundo en desarrollo es más alto de lo que pensábamos", reconoció hace algunos meses el director del Grupo de investigaciones sobre el desarrollo del Banco Mundial, Martin Ravallion.
Precisamente, la decisión de situar la línea de pobreza extrema en menos de 1,25 dólares al día está directamente relacionada con esta estimación errónea. No obstante, Ravallion advierte en un estudio reciente que, aunque el número estimado de pobres ha aumentado, la tasa de reducción de la pobreza en el mundo en desarrollo "se mantiene tan firme como cuando se analizaba el fenómeno con los datos de precios de 1993".

Las regiones más pobres

Las estimaciones actuales apuntan a que todavía en 2015 habrá unos 1.000 millones de personas que vivirán con menos de 1,25 dólares al día. Las regiones de peor pronóstico se localizan en África y Asia. En el continente africano, el 50% de la población del sur del Sáhara vive en la pobreza extrema. La tasa no ha variado desde 1981. Incluso el número de personas pobres ha pasado de 200 millones en 1981 a 380 millones en 2005.
La reducción de los niveles de pobreza en China ha permitido disminuir las tasas en Asia oriental
Por su parte, Asia oriental (la región más pobre del mundo en 1981) ha visto disminuir la tasa de pobreza del 80% de la población al 18%, unos 330 millones de personas. El éxito se debe, principalmente, a la reducción de los niveles de pobreza en China. En Asia meridional, la tasa se redujo del 60% al 40%, aunque el número total de personas pobres rondaba los 600 millones en 2005.
En los países de ingreso mediano, la línea de pobreza media se sitúa en menos de dos dólares al día. En esta situación vivían en 2005 unos 2.600 millones de personas, una cifra que apenas ha variado desde 1981 y que denota los escasos progresos que se han conseguido en este tiempo. Según este parámetro, sólo América Latina, Oriente medio y norte de África han disminuido la tasa de pobreza, mientras que ésta ha aumentado en Europa oriental y Asia central.

Pacto contra la pobreza

El 19 de diciembre del pasado año, se firmó el Pacto de Estado contra la Pobreza. Su objetivo es establecer compromisos "firmes y duraderos" para que las políticas de cooperación se mantengan en el tiempo. La Coordinadora de ONG para el Desarrollo-España, promotora de esta iniciativa, calificó el pacto de "acontecimiento de extraordinario valor".
Para recordar aquel compromiso y exigir otros nuevos, a lo largo de esta semana se han organizado en todo el país diversas movilizaciones que culminarán hoy y mañana con manifestaciones en numerosas ciudades.
Estas acciones pretenden poner el acento en los datos que afectan a España, donde una de cada cinco personas se encuentra en situación de pobreza y exclusión y, al menos una de cada tres, lo está "en algún momento de su trayectoria vital". "Los impagos se han multiplicado, las visitas a los bancos de alimentos son cada vez más frecuentes, las colas en los comedores sociales son cada día más largas, además de estar creciendo la visita a la parte trasera de los grandes supermercados", describe la Red Española de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN).
Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) sitúan bajo el umbral de pobreza relativa (con unos ingresos anuales cercanos a 6.400 euros) al 19,9% de la población. Por sexo, las mujeres superan esta cifra en algo menos de dos puntos, mientras que los hombres se encuentran por debajo. Los grupos más afectados son los menores de 16 años y las personas de 65 o más años, así como el 37,6% de la población parada y un 9,8% de las personas ocupadas.

 
¿Se puede erradicar la pobreza?

Las ONG aseguran que es viable, aunque conseguirlo exige cambios importantes y mucha voluntad
En la actualidad, cerca de 1.000 millones de personas viven con menos de 1 dólar al día. La cifra es tan elevada que los Objetivos de Desarrollo del Milenio apenas se plantean reducirla a 420 millones en el año 2015. Un reto ya difícil de cumplir. Como en muchos otros aspectos, África es el continente más afectado. Se considera que un etíope medio es 35 veces más pobre que un europeo medio. Sin embargo, España tampoco se salva. El 19,8% de la población se encuentra por debajo del umbral de pobreza relativa. Las ONG aseguran que erradicar la pobreza es posible, pero reconocen que hace falta tiempo y, sobre todo, voluntad.

• Por AZUCENA GARCÍA
• Última actualización: 16 de octubre de 2007

Colectivos de riesgo en España

La Unión Europea definió en 1984 a las personas pobres como "aquellas cuyos recursos (materiales, culturales y sociales) son tan limitados que los excluyen del nivel de vida mínimo considerado como aceptable en el Estado Miembro en el que viven". De acuerdo a esta definición, se puede distinguir entre pobreza relativa, cuando hay falta o escasez de alguna necesidad, y pobreza absoluta, cuando se carece de los estándares mínimos, como nutrición, salud y vivienda.
La Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) del Instituto Nacional de Estadística (INE), con datos de 2004, determina que el ingreso medio neto de los hogares españoles es de 21.551 euros anuales (7.591 euros por persona). Las comunidades autónomas con mayores ingresos son Madrid (25.493 euros) y Cataluña (24.763 euros), mientras que las comunidades con los ingresos medios por hogar más bajos son Extremadura (16.470 euros) y Andalucía (18.336 euros). Por su parte, la Unión Europea fija el umbral de pobreza relativa en el 60% de la mediana de los ingresos por unidad de consumo. Este 60% equivale a 6.347 euros anuales para un hogar de una persona adulta, es decir, los hogares cuyos ingresos son inferiores a esta cantidad se consideran por debajo del umbral de pobreza relativa.
La Unión Europea fija el umbral de pobreza relativa en 6.347 euros anuales para un hogar de una persona adulta
Según los datos del INE, un 19,8% de los hogares españoles se encuentran en esta situación. Una cifra que apenas ha variado desde mediados de los años 90, pero que no revela condiciones de extrema necesidad, como las que padece el 3,5% de la población, sino una situación de riesgo. En concreto, los grupos que más preocupan son: las personas mayores de 65 años, que en un 29% de los casos viven bajo el umbral de riesgo de pobreza; los denominados trabajadores pobres (11%), que tienen un contrato laboral, pero en condiciones de precariedad; las familias numerosas y los hogares monoparentales con menores a su cargo. "La situación familiar es más difícil cuando hay menores", precisa Víctor Renes, responsable del Servicio de Estudios de Cáritas.
Como consecuencia de esta situación, en los últimos años se ha constatado que cada vez hay personas más jóvenes que se sitúan en el umbral de riesgo de pobreza. Por sexo, son las mujeres en edad activa y con menores a su cargo, o las mujeres mayores de 65 años, las que tienen más dificultades. Además, hay una relación importante entre baja cualificación, baja remuneración y precariedad en el empleo, "signos y rasgos muy importantes de la pobreza en España en este momento", alerta Renes.

Propuestas para afrontar la pobreza

Los expertos consultados coinciden en que la erradicación de la pobreza es posible, aunque conseguirlo exige cambios importantes. El crecimiento económico de nuestro país en la última década ha sido muy positivo, pero el umbral de pobreza no ha descendido. Por ello, urge que ese crecimiento vaya acompañado de una distribución de la riqueza y que el gasto social aumente hasta atender las necesidades de cada colectivo.
Es necesario un salario que permita salir del umbral de pobreza y fomentar la incorporación de la mujer al mercado laboral
Respecto a las condiciones laborales, es necesaria una remuneración que permita salir del umbral de pobreza y fomentar la incorporación de la mujer a este mercado. Para algunas personas, especialmente para las mujeres con menores a su cargo, el salario que reciben no es suficiente para conseguir unas condiciones de vida dignas, por lo que se debe mejorar tanto la calidad del empleo como la remuneración. A su vez, esta medida debe ir acompañada de una mejora en los servicios sociales y una atención especial a las personas inmigrantes, que requieren la ayuda de los mismos servicios sociales que el resto de la población, pero plantean un reto importante de integración.
En este marco, más de un millar de colectivos sociales han organizado la Semana contra la Pobreza, que tendrá lugar del 15 al 21 de octubre con movilizaciones en todo el mundo para reivindicar compromisos que beneficien a las personas que más los necesitan. "Las enormes diferencias de riqueza entre los más ricos y los más pobres están aumentando, a pesar de que sería posible acabar con la pobreza, si existiese voluntad política para hacerlo. La riqueza existe, pero está mal repartida", reclama David Ortiz, vocal de la Junta de Gobierno de la Coordinadora de ONG para el Desarrollo (CONGDE).

Menos de un dólar al día

En el panorama mundial, las cifras tampoco son alentadoras. Cerca de 1.000 millones de personas viven con menos de un dólar al día y, aunque los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) pretenden reducir esta cifra hasta 420 millones en el año 2015, las estimaciones apuntan a que en esa fecha todavía habrá 800 millones de personas en el mundo que vivan con menos de un dólar al día. "Auque se producen ciertos avances, todavía son insuficientes y no responden a los compromisos adquiridos para la consecución de los ODM", explica David Ortiz.
En el año 2015, todavía habrá 800 millones de personas en todo el mundo que vivan con menos de un dólar al día
Se considera que los tres elementos determinantes para hacer frente a la pobreza mundial son la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD), la condonación de la deuda externa y las reglas del comercio internacional, que se encuentran en el origen de las principales causas de pobreza. Respecto al primer aspecto, las asociaciones sin ánimo de lucro insisten en la necesidad de destinar el 0,7% del Producto Interior Bruto a AOD, una exigencia que Naciones Unidas planteó ya en 1970. "Llevamos 30 años de retraso", denuncia Ortiz.
Por continentes, África, en concreto África subsahariana, es la región del mundo con un mayor porcentaje de personas pobres motivado por el hecho de que "paga muchísimo más por los intereses de la deuda externa que lo que recibe como ayuda oficial al desarrollo. Los países ricos recibimos dinero del África subsahariana, lo cual no puede facilitar en absoluto su desarrollo", lamenta Ortiz. Por este motivo, el continente africano es que el que presenta un menor número de avances y el que, año tras año, encabeza todas las listas sobre el índice de pobreza.
El coordinador de campañas de Ayuda en Acción, Alberto Casado, considera que los ODM han permitido "meter en la agenda internacional" la necesidad de erradicar la pobreza, aunque advierte de que los avances no han sido suficientes. Es fundamental que, además de la ayuda oficial, cada ciudadano y ciudadana haga su aportación y se comprometa con la erradicación de la pobreza para que ninguna persona carezca, no sólo de dinero, sino de la capacidad para ejercer sus derechos. "Ése es realmente el indicativo de pobreza. La pobreza viene de la exclusión y ésta, a su vez, del no acceso a los derechos que tenemos como ciudadanos y ciudadanas", subraya Alberto Casado, coordinador de campañas de Ayuda en Acción.
"Cuando hablamos de pobreza, pensamos en el Sur, pero la pobreza también existe en el Norte"
En este sentido, es importante contemplar que la pobreza se da tanto en los países del Sur como en el Norte, por lo que las acciones encaminadas a paliarla deben contemplarse en cualquier lugar del mundo. "Cuando hablamos de pobreza, pensamos en el Sur, pero la pobreza también existe en el Norte, incluso se habla ya de un Cuarto Mundo", añade Casado.

Pobreza infantil

El último informe de Unicef sobre 'Bienestar de niños, niñas y adolescentes en las naciones económicamente avanzadas' revela que ninguno de los países analizados figura en el tercio superior de las clasificaciones para las seis dimensiones de bienestar infantil: bienestar material, salud y seguridad, educación, relaciones familiares y entre iguales, conductas y riesgos, y percepción subjetiva de bienestar entre los adolescentes. Sólo los Países Bajos y Suecia están cerca de lograr uno de los primeros puestos, lo que denota, según el estudio, una falta de correlación entre los niveles de bienestar infantil y el PIB per capita.
En general, el grado de pobreza infantil se analiza a partir de los ingresos de los padres, por lo que se considera que un niño o niña es pobre cuando su familia lo es. Pero esto no ocurre siempre. El responsable de Derechos de Infancia del Comité Español de Unicef, Gabriel González-Bueno, reconoce que la pobreza depende en buena parte del ingreso familiar, pero advierte de la influencia que también tiene el gasto. "Puede haber niños ricos en familias pobres y niños pobres en familias ricas", subraya. Por ello, esta organización utiliza otro indicador para analizar el índice de pobreza infantil: la tasa de mortalidad de menores de cinco años. Según ésta, los países más preocupantes son Sierra Leona, Angola y Afganistán, por este orden. "En África es donde más pobreza en general hay, pero en el sur de Asia es donde hay más niños pobres", concreta González-Bueno.
En cuanto al bienestar material, el informe de Unicef aclara que un total de nueve países del norte de Europa tienen una tasa de pobreza infantil por debajo del 10%, mientras que en Portugal, España, Italia, Estados Unidos, Reino Unido, Irlanda y Nueva Zelanda la pobreza infantil se sitúa por encima del 15%. No obstante, estas cifras no significan que en estos países los niños y niñas sean más pobres que en el resto, puesto que el umbral de pobreza para una familia en Hungría se sitúa aproximadamente en 7.000 dólares, mientras que para una familia de Estados Unidos sube hasta 24.000 dólares.
En África Subsahariana se concentran la mitad de las muertes infantiles, aunque sólo viven el 20% de los niños y niñas de todo el mundo
En salud y seguridad, menos de uno de cada 10.000 jóvenes europeos fallece antes de los 19 años, aunque ambos epígrafes constituyen una de la principal preocupación de las familias. Asimismo, a pesar de que en los países ricos cada vez es más complejo conseguir un trabajo o cierta estabilidad financiera, la situación queda lejos de la que se vive en los países más pobres, donde aproximadamente 72 millones de niños y niñas en edad de asistir a la escuela primaria ni siquiera tienen esa oportunidad. Se necesitan 6.000 millones de dólares anuales para que la educación primaria universal sea una realidad.
Una vez más, las peores condiciones se dan en África Subsahariana. A pesar de que sólo el 20% de los niños y niñas de todo el mundo viven en esta región, aquí se concentran la mitad de las muertes infantiles y por complicaciones durante el embarazo y el parto. "Por ello, los esfuerzos deben adecuarse a las distintas realidades locales", señalan desde la Alianza Española contra la Pobreza.
La pobreza infantil es especialmente dramática porque suele ir acompañada de un importante riesgo de exclusión social y falta de oportunidades. La vulnerabilidad de los menores les hace ser un blanco fácil de ambas variables. Especialmente las niñas ven recortados los recursos a los que tienen acceso, debido a las tradiciones culturales de algunos países subdesarrollados o en vías de desarrollo, que favorecen al sexo masculino. Por ello, es fundamental que se cumpla la Convención de los Derechos del Niño y que aumente la inversión en infancia, no sólo porque los niños y niñas tienen derechos que deben ejercer, sino porque son el futuro de cualquier sociedad. "Hay algunos avances y todavía muchas cuentas pendientes", concluye la Alianza.


fuente: EROSKI CONSUMER  http://www.consumer.es/solidaridad/

jueves, 16 de junio de 2011

POESIA ESPAÑOLA DEL SIGLO DE ORO III - SÁTIRA A UNA ALCAHUETA

Hay una (quien quisiere sabe della,
oiga), que Dipsas dicen que se llama
y es vieja que holgareis de conocella;
de los lazos y telas que ata y trama
le vino el nombre, que tan bien le viene
de alcahüeta y hechicera, es fama.
Gran mando el sacro Baco en ella tiene;
jamás vio el sol que se hallase llena
del falerno licor que la entretiene;
parece que no tiene sangre en vena,
vieja, arrugada, sucia, fiera y fea,
que su mismo semblante la condena,
sabe todas las artes de Medea;
las yerbas y las piedras más potentes
sabe mudar en lo que más desea;
volver hace a sus fuentes las corrientes,
y hace el sereno cielo estar nublado
y el nublado con rayos refulgentes.
Yo vi, si me creéis, el estrellado
cielo, gotas de sangre destilando,
y el orbe de la luna ensangrentado.
Pienso que esta de noche anda volando
entre nocturnas sombras, bruja hecha,
con pluma el viejo cuerpo cobijando.
Es fama, y antes tuve yo sospecha,
que goza de doblada vista de ojo
de la putana vieja contrahecha;
nadie la puede ver que no haya enojo;
tal es su sucio gesto y su semblante
que parece diabólico despojo;
hiende la fría tierra en un instante
y provoca las almas del infierno
do Furia no hay en ella semejante;
no se le escapa niña o niño tierno
cuya sangre no chupe, mengüe o beba
trayendo al diablo siempre en su gobierno.
A do quiera que va continuo lleva
el cuello de un rosario rodeado
con que a las simplecillas mozas ceba.
A dicha o a desdicha fui llevado
a parte do su mal consejo daba
a quien hermosas damas es dechado.
Tales palabras de malvada hablaba
a la presente estrella que tenía
(yo detrás de una puerta la escuchaba).
"Bien sabes, clara luz del alma mía
que ya te vio y habló aquel mancebo
y dijo que eras toda su alegría.
Mas tal es tu hermosura, tal el cebo
que tu vista derrama, si tuvieras
conforme a tu valor vestido nuevo;
tan dichosa pluguiera a Dios que fueras
como eres más hermosa que ninguna
que yo sé que quizás me socorrieras;
más fuete muy contraria la fortuna
con la estrella de Marte, pero mira
que coyuntura viene ahora oportuna.
Un nuevo y rico amante que suspira
por agradarte y muere por servirte
y lo que has de menester todo lo mira;
de su verdad no quiero yo decirte
mas de que me parece que debrías
pedirle, sin del todo a él rendirte;
si fingieses vergüenza medrarías,
pero si la tuvieses verdadera
mucha ganancia sé que perderías;
cuando con ojos bajos a manera
de quien está confusa, le mirares,
has de mirar en lo que trae cualquiera;
rogada tomaras lo que tomares
con arte y linda astucia y ocultando
nuestras necesidades y pesares.
Las rústicas Sabinas rehusaron,
reinando Tacio, amar más de un marido
y como en otras cosas no acertaron.
Agora es otro tiempo ya venido,
con leyes más conformes a la vida
que nos dicen del otro que ya es ido.
Casta es la hembra nunca requerida,
y si simplicidad no lo vedase
mejor sería pedir que ser pedida.
Resbálese la edad, el tiempo vase,
días, meses y años van corriendo
y aprieta la ocasión: no se te pase.
Ves el metal usado reluciendo,
el vestido que se usa está seguro,
la casa no habitada va cayendo,
pues de la misma suerte yo te juro
la belleza se pierde no tratada,
y si se trata no: yo lo aseguro,
más para ser de arrugas conservada,
no basta uno, ni dos, ni cuatro amantes
a quien por precio seas entregada;
si tú quieres creerme trata antes
 a muchos admitir, porque de tantos
son ganancias más ciertas e importantes;
procura repeler a tantos cuantos
cayeren en tus manos, de tal suerte
que guardes no les des causa de espantos.
A uno dices: -Señor, está a la muerte
mi madre, por su vida que me envíe
algo con que se vuelva recia y fuerte-
La razón, tiempo, y ocasión te guíe
no te prendes de rimas y sonetos,
en dineros es bien cualquier se fíe;
mira que si tu amante con tercetos
pretende hacerte pago, vaya fuera
o traiga fundamentos más perfectos.
¡Oh! Si hacerte rica yo pudiera
con escudos, que es cosa que más quiero.
y no con coplas de sutil manera;
quien tuviere será mejor que Homero
 y aquel que más trujere, si eres cuerda
en gozar de tu amor será el primero.
Avisote, vergüenza no te muerda
si fueres en entrando recuestada,
admítele si trae, sin ser lerda;
no te engañe el amante que mostrada
la tarja del blasón de sus abuelos
te quisiera ganar sin darte nada.
Si acá bajase Apolo de los cielos
y pretendiese haberte y no te diese,
dale tus tus y váyase con duelos.
Si alguno siendo hermoso te dijese:
-Ámame, pues que soy de bel figura-,
cuerda será quien de ello se riese.
Mientras tiendes las redes con blandura
has de adquirir el precio; no te huya
algún amante viendo que eres dura.
Sienta al enamorado que eres suya,
mas mira que de balde no lo sienta,
pide que el corazón te restituya.
Mira que, todas veces, no consienta
tu voluntad, pidiéndote posada
fíngite mal dispuesta o descontenta;
dirás que estás agora confesada,
otras veces dirás que por los males
suplicas que te dé por excusada;
mas mira que quizás podrían ser tales
y tantas despedidas, que sería
menguarle en el amor y sus señales;
dirásle luego: -Calla, vida mía,
que en no verte me falta mi contento
y mi placer, mi gloria y alegría-
Tu puerta al que rogare en un momento
esté sorda, y abierta al que trajere,
que todo lo demás es sombra y viento;
quien contigo esta noche conviniere
dormir, conviene oiga y vea las quejas
del que después del otro entrar quisiere;
entienda que por él al otro dejas,
y si por dicha en algo se ofendiere
conviene dél entienda que te quejas;
hazle entender que sólo por él mueres,
pídele celos que es muy gran indicio
de amor, y a mí la culpa si perdieres.
De enojarte no tengas ejercicio
y si lo hicieres, dura poco en ello,
que largo enojo saca a amor de quicio.
Si engañares a alguno, que entendello
él pudo fácilmente, tú le jura
 que no tienes de culpa ni un cabello.
No temas de jurar, que no es perjura
ninguna enamorada, que jurando
disculpar de su culpa se procura.
Los oídos está Venus cerrando
a todos los del alto y sacro coro
sí un amante se encuentra aquí jurando.
Ten este aviso más que plata y oro,
que tengas los criados enseñados
a demostrar qué falta a tu decoro,
di tú: -No es menester, desvergonzado,
callar, que quien me da su amor no quiero
me dé otros atavíos más preciados-;
que si él es liberal, y da dinero,
yo te prometo acuda prestamente
por presumir y hacer del caballero.
Hermana, madre o hija diligente
cualquiera esté en pedir, y tú muy tibia,
y verás el provecho prestamente,
y cuando sientas que el amor se entibia,
acude con remedios, porque crea
que con tu amor su mal y pena alivia;
y trata con tu amante no se vea
son otro que compita en los amores,
que el amador seguro no desea.
Vea dones que te envía n amadores
a quién verá por él tiene en nada,
que yo te digo que él te hará mejores.
Si su bolsa estuviese tan clavada
que no diere don que les exceda,
¡váyase a pasear sin darle entrada!
Y si te ha dado mucho, lo que queda
le sacarás con otras invenciones
sin que negarte parte de ello pueda.
Pídele que te empreste diez doblones
o más, y ofrece prenda, porque crea
que es ello así verdad lo que compones.
Después la paga del prestado sea
dulces requiebros y hablas enmeladas,
dos mil favores que a los ojos vea.
Si tuvieres mis reglas estudiadas
sé no te acordaras de aquesta vieja
de aquestas mejillas arrugadas.
Si alguna aguja dieres saca reja
y a los que en esas uñas te cayeren
desplúmalos riendo y despelleja.
Sé que me alabarán los que me oyeren
los consejos tan sanos que te he dado
y se aprovecharán los que supieren.
Hija, ten de los dicho gran cuidado
y acuérdate de mí cuando estuvieres
en más dichoso y próspero estado."
Notaba yo la astucia de mujeres
que un punto más que diablo diz que saben,
y su saber con todos sus poderes.
Decía: "Tus maldades ¿dónde caben,
vieja astuta, malina más que entena
digna que a ti y no a la madre alaben?
Pasábase la noche y tuve pena
porque me descubrió la sombra mía
que la conversación tuya no es buena."
Apenas en mis pies tener podía
mi cuerpo, porque habiendo visto aquello
quería tomar venganza, y ya quería
arremeter a su arrugado cuello
y darla muchas coces, y pelalla
su blanco, deshonesto y vil cabello;
mas no pude, Señora, castigalla
como ella merecía y yo quisiera,
mas algún día habré de negocialla
a Dios, por quien Él es, suplico quiera
que vivas desterrada y sin gobierno,
sufriendo suma hambre y gran dentera,
perpetua sed y duelo sempiterno.

DIEGO HURTADO DE MENDOZA 1503-1575

POESIA ESPAÑOLA DEL SIGLO DE ORO II


I
Si el corazón de un verdadero amante,
y un continuo morir por contentaros,
y un extender mi alma en desearos,
y un encogerme, si os estoy delante;
y si un penar con un sufrir constante,
satisfecho y contento con miraros,
y un derramar mis pasos por buscaros,
preguntando por vos a cada instante;
y si un tener mi razonar compuesto,
y en hablándoos, sin más, luego turbarme,
con un grande embarazo y desvarío,
los accidentes son que han de llevarme
con público pregón a morir presto,
la culpa es vuestra y el dolor es mío.

II

Dulce soñar y dulce congojarme,
cuando estaba soñando que soñaba;
dulce gozar con lo que me engañaba,
si un poco más durara el engañarme.
Dulce no estar en mí, que figurarme
podía cuanto bien yo deseaba;
dulce placer, aunque me importunaba
que alguna vez llegaba a despertarme.
¡Oh sueño, cuánto más leve y sabroso
me fueras, si vinieras tan pesado,
que asentaras en mí con más reposo!;
durmiendo, en fin, fui bienaventurado;
y es justo en la mentira ser dichoso
quien siempre en la verdad fue desdichado.

JUAN BOSCAN 1474-1542

jueves, 9 de junio de 2011

POESIA ESPAÑOLA DEL SIGLO DE ORO

Escrito está en mi alma vuestro gesto
y cuando yo escribir de vos deseo
vos sola lo escribisteis, yo lo leo
tan sólo que aun de vos me guardo en esto.

En esto estoy y estaré siempre puesto
que aunque no cabe en mi cuanto en vos veo,
de tanto bien lo que no entiendo creo,
tomando ya la fe por presupuesto.

Yo no nací sino para quereros;
mi alma os ha cortado a su medida;
por hábito del alma misma os quiero;
cuanto tengo confieso yo deberos;
por vos nací, por vos tengo la vida,
por vos he de morir y por vos muero.

GARCILASO DE LA VEGA (1501-1536)

PASEOS POR CÓRDOBA (EXTRACTO)

El río Guadalquivir

Tanto por todo el lado norte como por el este, confina el Campo de la Verdad con el río Guadalquivir, el cuarto en importancia, el quinto en longitud y el sexto en tributarios de cuantos nacen en España.
Estrabón da a este río diferentes nombres, pero nosotros sólo vemos claro el del Betis, con que lo conocieron los romanos, dando nombre a la Bética o Andalucía, y con el que siguió hasta que los árabes dieron en llamarle Nahrálatdim y Wadilquebir. Ambas palabras significan río grande, habiéndole quedado la segunda, aunque alterada, o sea, el titularlo Guadalquivir.

Nace este río en las sierras de Alcaraz, Segura y Cazorla, y desemboca en el océano inmediato a Sanlúcar de Barrameda, después de haber recorrido ochenta leguas de extensión y haber ocupado con su cauce 1.605 cuadradas, en las provincias de Jaén, Córdoba, Sevilla y Cádiz. Concretándonos a la nuestra, entra en ella por entre el este y el noroeste, y sale por entre oeste y sudoeste, atravesándola en una distancia de 22 leguas, en que fertiliza los términos de Villa del Río, Montoro, Pedro Abad, El Carpio, Villafranca, Córdoba, Almodóvar, Posadas, Hornachuelos y Palma del Río, aumentando su corriente con los ríos de las Yeguas.

La navegabilidad del río

Mucho es lo que se ha hablado y escrito sobre la navegación del Guadalquivir, alegando como principal razón el haberlo sido en tiempos de los romanos y de los árabes y después hasta fines del siglo XV, sosteniéndose gran comercio entre Córdoba y Sevilla por medio de balsas o barcos planos, que fue lo que siempre usaron, arrastradas casi todas por la silga, nombre de las cuerdas de que tiraba cierto número de caballerías, y sin duda debía ser de este modo, porque los ingenieros que por orden del Gobierno realizaron los estudios para la navegación aseguran que una de las principales dificultades es la rápida pendiente de este río, que sería preciso contrarrestar por medio de grandes presas, costosísimas en su construcción, y después en conservarlas.
Además, calcúlanse necesarios 1.500 ó 2.000 pies cúbicos de agua como mínimo para la navegación, y el Guadalquivir sólo tendrá 1.700 después de incorporársele el Genil, y antes unos 1.100 a 1.300, cantidad que se va disminuyendo conforme se acerca a Córdoba, y que es considerada insuficiente. En estos estudios, hechos de 1842 a 1844, se calculaban las obras en 15.040.000 reales, y se indicaba que su conservación, unida al gasto de la empresa, superaría tal vez a los derechos que se establecieran.

La navegación en tiempo de los romanos y de los árabes y aun bastante tiempo después de la conquista está justificada en casi todos los historiadores; tal vez, entonces, el mayor caudal de aguas y la falta de otra comunicación más rápida, con que actualmente contamos, haría preferible aquélla en economía de gasto y tiempo. Fernán Pérez de Oliva, uno de los hijos más sabios de Córdoba, leyó ante la Ciudad, en las casas hoy café Suizo, una extensa memoria sobre este asunto, en que expone muchos y curiosísimos datos, como puede verse en la colección de sus obras. En el Archivo municipal, donde tantos y tan interesantes documentos se conservan, hemos visto varios privilegios de los reyes don Sancho, don Fernando el Emplazado y don Alfonso XI mandando a los dueños de corrales y azudas dejasen el paso franco a los barcos, sin peligro para sus conductores.

En 1559 se dieron unas ordenanzas para los barcos, y ya por este tiempo apenas serviría el río cuando Felipe II da una pragmática tratando de hacerle navegable, idea que nunca se abandonó, toda vez que en 27 de abril de 1621 se mandó que todos los dueños de las azudas abrieran en ellas pasos para los barcos, con cuatro varas de ancho y dos de fondo. En 23 de diciembre de 1626 nombró el rey un superintendente especial para los trabajos de navegación y se señalaron los pueblos que habían de contribuir a su costo y los arbitrios de que dispondrían. En 12 de abril de 1629 la Ciudad de Córdoba autorizó a una comisión de veinticuatros y jurados para que tomasen a censo cierta cantidad con destino a los gastos de las obras del río. El expresado superintendente publicó en Sevilla un bando, fecha 30 de junio de 1768, en que obligaba a todos los dueños de terrenos contiguos al río a que rozasen el taraje y demás maleza que había obstruido el camino necesario para la silga de que antes hablamos, operación en que la Ciudad gastó 15.381 reales y 17 maravedises, por lo que correspondió a sus baldíos.

Por último, en nuestros tiempos se hicieron los estudios de que antes hablamos. Sin embargo de todo lo expuesto, creemos que, lejos de pensarse en la navegación del Guadalquivir, deben utilizarse sus aguas en canales de riego, como convendría hacer con casi todos los demás ríos de España, aumentando por este medio el valor de los terrenos que recibieran tan gran beneficio.

Azudas, molinos y vados

En el término de Córdoba cortan también el río varias azudas o represas para los molinos harineros, que la surten casi en totalidad de las harinas necesarias, aun cuando hoy existe una máquina de vapor próxima a la Estación del ferrocarril, y se hace gran consumo de las que vienen de Castilla.
Aquéllos son los siguientes: Albolafia, Escalonías, la Alegría, Casillas, Jesús María o de Enmedio, Salmoral, Pápalo Tierno, San Antonio, San Rafael, Martos y los de Lope García.

También tiene dentro de este término diferentes vados, que toman los nombres de las heredades cercanas, y son los de las Quemadas, del Haza de la Monja, Lope García, del Adalid -de que volveremos a hablar-, Casillas y la Reina. Y por cima del Arenal hay una gran barca, cuyos derechos de pasaje se arriendan, y facilita el paso de la sierra a la campiña hacia el camino de Castro.
El trayecto entre el puente y la azuda de Martos es conocido por el Tablazo de las Damas, porque es el sitio que han elegido siempre las cordobesas para sus baños y sus paseos en las pequeñas barcas que aún sirven para aquéllos, y como medio de comunicación entre Córdoba y el barrio del Espíritu Santo.

Festejos y pesca

Esta parte del Guadalquivir ha sido muchas veces destinada a festejos públicos, efectuándose las regatas, que en otras partes llaman tanto la atención de los forasteros. Se han figurado combates navales, atacando desde los barcos a un castillo formado sobre otros dos unidos y sujetos con un tablado encima; otras veces se ha figurado tomar algunas al abordaje, y otras han pasado muy de prisa para alcanzar algunos objetos colgados en diferentes puntos, dando lugar a que varios mozos tomen un inesperado baño, que a veces ha puesto en peligro sus vidas. Tal sucedió en 1651 en las fiestas que se hicieron para celebrar la colocación del San Rafael que está a la mediación del puente.
Péscanse en el Guadalquivir muchas clases de peces, algunos muy grandes y otros muy buenos, habiendo ocasiones en que se han cogido sollos, aunque esto se ha considerado siempre como una rareza.
También se ha utilizado este río en muchas ocasiones para el transporte de las maderas de Segura hasta Sevilla, operación que siempre ha llamado mucho la atención, llevando a sus orillas multitud de curiosos, como ha sucedido en el presente año, 1876, que han bajado unas 70.000 traviesas para la empresa del ferrocarril de Málaga.

Las ríadas del Guadalquivir

Unas veces las recias y continuadas lluvias y otras el deshielo en la provincia de Jaén, han hecho que el Guadalquivir aumente sus aguas de tal manera que ha puesto en gravísimos peligros a los vecinos del Campo de la Verdad. De estas crecientes o riadas, como las llaman en Córdoba, citaremos las que encontramos anotadas en algunos manuscritos que hemos podido registrar.
En 1481 anduvieron los barcos por las calles de los Lineros, la Curtiduría, la Fuensanta y Puerta del Puente. En 1544 sucedió lo mismo, y además entró el agua en varias bodegas del Campo de la Verdad, causando considerables pérdidas. En 1554 fue tan grande la creciente que rompió por el murallón de San Julián, dejando aislado el barrio del Espíritu Santo, tanto por la espalda como por la conclusión del puente. Hubo por consiguiente algunos barcos en diferentes puntos de la ciudad. Aquellos vecinos se asustaron tanto que sacaron sus muebles y los pusieron sobre carretas en el alto que forma la parroquia.
En 1604 sucedió lo mismo que en la anterior. En esta ocasión se cogían muchísimos peces, algunos de veinticinco libras de peso.
En 1618 anduvieron también los barcos por la Fuensanta y la calle de Lineros. En 24 de enero de 1626 entró el agua a cubrir la plazuela de las Cinco Calles, donde hubo barcas sacando los muebles de algunas casas.
El año 1684 es, sin duda, uno de los que más hicieron subir el río, y en el que, a no venir la lluvia a intervalos, se hubiera desbordado, inundando gran parte de la población, puesto que se sufrieron catorce avenidas, siete hasta la mitad de los molinos y las otras siete en esta forma: del 19 al 25 de diciembre de 1683 llegó el agua a lo alto de los molinos de en medio; a 28 de dicho mes quitó un cuchíllete o entibo del puente y se llevó varias cruces de un calvario que había al principio del camino de Castro; el 3 y 5 del 84 se llevó las cruces que habían quedado; el 22 del mismo año hundió el arco del puente en que faltaba el cuchíllete y se llevó la mitad de la casa ermita de San Julián, que estaba del lado allá de aquel barrio; en 5 de febrero cubrió el molino de en medio, bajando en el mismo día; al siguiente subió mucho más, y entre la infinidad de objetos que pasaron fue un barco que debió recoger en otro punto; en 10 de febrero se llevó la otra mitad y parte de la ermita de San Julián.

La causa de estas avenidas fue la continuación de las lluvias durante tres meses, que tuvieron a los molinos sin funcionar dieciséis días y a los pobres sin poder trabajar en el campo por mucho más tiempo, siendo tal la necesidad que muchos se cayeron muertos en las calles. Se dispensó guardar la Cuaresma, y muchos se comían las reses que se morían en el campo, porque el ganado pereció en gran número, tanto, que sus dueños lo ponían a la venta y llegó el caso de valer una vaca 30 reales y un buey 50. Había burros hasta a 10 reales y caballos muy buenos a 150, según afirma el popular escritor Martín López, de quien tomamos estos apuntes, quien además cuenta que habiéndose aislado dos veces el Campo de la Verdad, pusieron de corregidor en él a don Fernando Villarroel, con un alguacil, y que el primero asistía a misa en aquella parroquia, donde tenía asiento de preferencia. Dicho escritor compara este año con el de 1677, en que dice valió una gallina 17 reales, el trigo 110 y la cebada a 66, que es como si ahora valiese a cuatro veces esas cifras.
En 21 de enero de 1687 volvió a subir el río, llevándose otra parte de la casa ermita de San Julián, la que desapareció del todo en otra avenida en 19 de febrero siguiente.
En 20 de noviembre de 1691 hubo otra gran creciente como las ya anotadas, con corta diferencia.
En 1692 llegó el agua a la ventana entre alta y baja que tiene la sacristía de la parroquia de San Nicolás. El Sacramento se sacó oportunamente y se llevó a la iglesia de la Caridad, hoy Museo. En esta creciente se perdió por completo la ermita de San Julián.
En 1693 hubo otra creciente muy considerable. En 1697 subió el rio hasta las tierras de labor por el lado de la campiña. En 1698 fue tal la creciente del río que no pudiendo salir el agua del barrio de San Lorenzo, se anegó éste y hubo barcos en la calle de la Rejuela y en San Juan de Dios, como dijimos al visitar estos sitios.
En 1739 creció tanto el río que se llevó el puente que había cerca de la villa de Palma. En 14 de enero de 1751 hubo otra grandísima creciente. En 1785 hubo una de las avenidas más grandes que se han conocido, y que causó muchísimos daños en todas las posesiones cercanas al río. En 26 de diciembre de 1821 llegó el agua a la ventana de la sacristía de San Nicolás, y anduvieron barcos por la Puerta del Puente, calle de Lineros y otros varios puntos.
Después de la del año 21 han tenido lugar otras grandes avenidas, siendo la más notable en 1860, si bien no entró el agua en Córdoba, consistiendo principalmente en que, habiéndose destruido el murallón de San Julián, las aguas se extienden por aquel lado, y además en que la calle de Lineros, la salida de la Puerta del Puente y otros puntos están a más altura que otra veces, por los terraplenes que se han variado. En esta última avenida ocurrió la desgracia de que habiéndose quedado un pastor aislado se subió a un árbol, de donde no fue posible bajarlo, pereciendo cuando las aguas llegaron a aquella altura.

En todas las avenidas algunos vecinos del Campo de la Verdad se ponen en la orilla del río, y con un gancho atado a una cuerda recogen cuanta leña pueden de la mucha que arrastra la corriente, teniendo algunos la mala costumbre de atarse dicha cuerda a la cintura para hacer más fuerza cuando el leño es grande, habiendo ocurrido, más de una vez, el ser arrastrados y sucumbir entre las aguas.
En las reseñas de las crecientes que hemos extractado se hacen muchas descripciones de haber visto pasar multitud de animales muertos y otros objetos; pero son tan parecidas todas y en general tan pesadas, que hemos creído lo más acertado hacer sólo estas ligeras indicaciones.

Víctimas del río

Muchas son las víctimas que cuenta este caudaloso río, puesto que puede calcularse en seis el número anual de los que mueren entre sus aguas, sin retirarnos de las cercanías de Córdoba. Por consiguiente, en el transcurso de los siglos suman una cantidad fabulosa. Entre otros, debemos anotar que el 18 de marzo de 1684, cuando aún estaba el río bastante alto, quince o veinte forasteros se empeñaron en pasar la tarde paseando en un barco por el Tablazo de las Damas, y sin que se averiguase claramente la causa, aquella pequeña nave se volcó y todos cayeron al agua, salvándose únicamente cinco que pudieron recoger en otros barcos y a fuerza de mucho trabajo. En este mismo año una mujer, tal vez demente, arrojó por el puente a una hija suya de doce a catorce años de edad, salvándose milagrosamente en la azuda de los molinos inmediatos. Este caso se ha repetido en uno de estos últimos años con otra niña recién nacida, por lo que su madre fue encausada.

También se han dado casos de suicidios, arrojándose desde el murallón de la Ribera o desde el puente, como lo hizo de éste último, en 7 de diciembre de 1827, un cura y músico de apellido Leiva, natural de Málaga.
Entre el puente y el molino de Albolafia existe aún multitud de material de guerra que los franceses arrojaron desde San Pelagio, donde tuvieron el parque de artillería, cuando apresuradamente abandonaron Córdoba.
En la isleta que forma el río por bajo de los molinos fueron quemados algunos de los infelices que sentenció la Inquisición, recién instalada en Córdoba, a ser víctimas de las llamas.

Dos sitios hay en este río que nuestros antepasados reverenciaban por haber arrojado en ellos a muchos de los cristianos que sufrieron el martirio por defender nuestra sacrosanta religión; aquéllos eran la parte frente al Campo Santo y huerta del Alcázar, y por cima del molino de Martos.

Las sequías y estiajes

Aunque no en el número de las crecientes, ha tenido, sin embargo, el Guadalquivir ocasiones en que, a causa de las continuadas sequías, ha disminuido su caudal, hasta el punto de no poder funcionar los molinos. Tal sucedió en 1683, en que durante un año no llovió, escaseando el pan de tal modo que hubiera faltado del todo si el corregidor don Francisco Ronquillo y Briceño, de quien ya nos hemos ocupado, no hubiese sacado 15.537 reales del producto del vino forastero en la Alhóndiga, para hacer unas cuantas atahonas que moliesen todo el trigo necesario.
Se hicieron multitud de rogativas implorando el beneficio de la lluvia, sin conseguirla, dando lugar la sequía a que muriese la mayor parte del ganado que tenían los labradores, quienes consiguieron una provisión consintiéndoles no empanar más que la tercera parte de sus tierras; mas el corregidor Ronquillo hizo saber a los propietarios de los cortijos que ellos habían de empanar las restantes, no siendo preciso llevar a cabo ni una ni otra disposición, porque el otoño se presentó muy bien, animando a los labradores, que al fin lograron una siguiente buena cosecha.

Teodomiro Ramírez de Arellano y Gutiérrez de Salamanca
Paseos por Córdoba

domingo, 5 de junio de 2011

PASEOS POR CÓRDOBA (EXTRACTO)






La licenciosa vida de Don Rodrigo de Vargas

Los Vargas fueron en Córdoba una de las familias más conocidas, tanto por su nobleza como por los diferentes cargos ejercidos por ellos en diferentes ocasiones. En el último tercio del siglo XVI moraba en ésta don Juan de Vargas, quien tuvo por hijo a don Rodrigo, uno de los jóvenes que más figuraban por su gallardo aspecto, sus modales finos y su trato afable y bondadoso. Muy joven aún, cuando todavía no habían empezado a mitigarse los ardores de su juventud, obligole su padre a contraer matrimonio con la hija de otro noble cordobés y que hasta la muerte guardole con su cariño la fidelidad propia de toda esposa buena y honrada.
Pasados pocos años después de su enlace empezó don Rodrigo a galantear a otras mujeres, tomando tal afición a ellas que no perdonaba medios por difíciles que fueran para conseguir sus deseos. Esto le atrajo multitud de lances con los padres o maridos de sus predilectas, y bien pronto la fama de Vargas llegó a tal grado que todos le temían, haciéndole el blanco de sus odios y rencores.
Entre los muchos lances contados de este aventurero joven hay uno ocurrido en la antigua calle de las Platerías, hoy parte de la Carrera del Puente. Un platero estaba escondido huyendo de la justicia por haber causado una muerte. Cerca de su casa vivía una dama a quien don Rodrigo requería de amores, y no hallando otros medios, se entraba en la casa de aquél para hablar con la vecina sin hacer caso de las observaciones hechas por la mujer del platero. Una noche llegó éste, enterose del motivo de tales visitas y, cortesmente primero y después hasta con amenazas, le dijo buscase otros medios de comunicación con aquella mujer, toda vez que la suya perdería en su buen nombre si veían entrar y salir a un caballero que tal fama de libertino había alcanzado.
Ofreció hacerlo, mas esto no tuvo cumplimiento, y volviendo el platero a encontrarlo en su casa, arremetió contra él con tal ímpetu y con tanto fue rechazado, que se trabó una horrible lucha en la cual resultó muerto el industrial y Vargas con más de treinta heridas, saliéndose arrastrando a la calle, donde casi desangrado lo recogieron el marqués de El Carpio y sus hermanos, quienes lo llevaron al Sagrario de la Catedral, costándole no poco el curarse tantas y peligrosas heridas. Por último, arreglose el asunto y quedó libre después de hacer grandes donativos a la viuda y cuantos intervinieron en la causa.


Cuando parecía que el escarmiento fuera el resultado del lance referido y otros de igual índole, don Rodrigo continuó en sus desaciertos, indisponiendo matrimonios, desconcertando casamientos y llevando la alarma a todas las clases de Córdoba, puesto que a nadie respetaba por elevada que fuera la persona a quien ofendía. Cierta noche encontró en la calle del Baño, hoy de Céspedes, a otro caballero, amigo suyo, a quien preguntó por qué paseaba tanto por aquel sitio, puesto que lo había ya visto tres o cuatro veces pasar a la misma hora. De buena fe confesole que con el mejor fin hacía el amor a la hermana de don Pedro de Mesa, a la que pensaba unir su suerte. Ingenua conversación que le sirvió a Vargas para uno de sus enredos. Díjole extrañaba mucho que un caballero tan principal se prendase de una mujer descendiente de raza judía, con lo cual mancharía su honra y el buen nombre de su familia. Creyose en sus palabras y el caballero se retiró de la casa, donde se extrañó mucho su conducta, que al fin aclararon, demostrándole la falsedad de la noticia, con lo que se concertó de nuevo y realizose el casamiento, declarándose enemigos de don Rodrigo, quien ya contaba con muchos y muy temibles.
Los señores de Femán-Núñez moraban en aquel tiempo en la casa de la calle del Paraíso, que al pasear por ella citamos. Éstos tenían varias hijas y una huérfana que habían recogido y educado como una de las primeras. Era hermosa y don Rodrigo fijose en ella con su mala intención acostumbrada. Sedujo a uno de los sirvientes, consiguiendo al fin sus impúdicos deseos, entrando de noche sin ser visto de persona alguna. Descubriose al cabo por otra de las criadas, y cuando una noche estaban más descuidados en su entrevista, apareciose la respetable señora de la casa acompañada de dos sirvientas con hachas encendidas. La pobre joven desmayose, mas don Rodrigo oyó con calma los apóstrofes que se le dirigían y, vistiéndose con cachaza contestó a la señora que lo había hecho porque le placía así, y que agradeciese a las canas el que no hubiera pretendido hacer con ella lo mismo, marchándose en seguida como si nada le hubiese sucedido.
La pobre huérfana fue al día siguiente a acabar su vida en un convento, y la ultrajada y orgullosa señora de Fernán-Núñez juntó al otro día a todos sus parientes y amigos, casi todos ofendidos por las liviandades de Vargas, y convinieron en acabar con él, llevando la dirección en el asunto el racionero don Pedro Cortés, que ya hemos dicho vivía en la calle de Pedregosa.
Como aclaración y para conocer el principal personaje que medió en la muerte de don Rodrigo, o sea el que la realizó, debemos contar otro suceso íntimamente relacionado con éste, por cierto el alma de toda esta tradición, un tanto dramática e interesante.

Don Fernando Páez y el pajecillo Luna

El domingo de la Santísima Trinidad del año 1586 corríanse toros y cañas en la calle de la Feria, que ya hemos dicho era adornada para celebrar estas fiestas, a que eran tan dados los caballeros cordobeses. Entre los muchos que aquella tarde acudieron fue uno don Fernando Páez Castillejo, dueño de la casa de los señores Trevilla en la plazuela de Don Jerónimo Páez.
Cerca del Portillo veía el espectáculo un jovencillo, vestido de paje, por serlo del alférez mayor de la Ciudad don Pedro de Córdoba, de quien la maledicencia decía ser hijo natural. Cerca de él revolvió su caballo don Fernando, con tan poco tino que arrolló al pajecillo Luna, que era como llamaban al joven, el que amostazado por haber servido de burla a los espectadores, cogió las riendas al caballo y pidió al jinete satisfacción de la ofensa. Contestósele como a un niño, y creyéndose despreciado fuese a su casa, tomó una espada y esperó al caballero en el camino de la ya dicha plazuela.
Segunda vez sujetó al caballo y desafió a don Fernando de Páez; éste despreciolo de nuevo y negose a lidiar con él. El paje, sin miramiento alguno, le dio una estocada en el pecho que lo dejó caer muerto sobre un montón de cal, donde el autor de los Casos raros asegura haberlo visto. Acudió gente a recoger al muerto, que llevaron a su casa, y el paje echó a correr por la hoy calle del Horno del Cristo a la Catedral, a cuyo sagrado se acogió.
En la casa de Páez todo era confusión y pena, sus parientes se reunieron y en unión de la justicia resolvieron ir en busca del agresor. Llegaron, en efecto, a la Catedral, encontrándolo sentado en la grada de uno de los altares, desde donde don Rodrigo de Vargas, que iba delante, lo sacó casi a la rastra. Ya cerca de la puerta lo apostrofó el paje, diciéndole entre otras cosas que era extraño ver a un caballero de su clase ejercer el oficio de corchete con el que estaba bajo el amparo del templo, palabras que le valieron una bofetada tan grande que hizo brotar sangre de su boca. Mas lejos de desmayar el joven delincuente juró a gritos que aquella ofensa había de costarle la vida, amenaza escuchada con desdén, porque todos creían que bien pronto tendría que expiar en un cadalso el asesinato alevoso cometido en la persona del caballero Páez.
Tenemos al pajecillo Luna en la cárcel, sita en la hoy calle de las Comedias, frente a la Virgen de los Faroles. El proceso continuó su marcha a pesar de las protestas del Cabildo eclesiástico, por haber extraído al preso del sagrado recinto de la Catedral. Una sentencia de muerte fue el resultado, señalándose el día de su cumplimiento. Diose el consabido pregón de que nadie osase salir a la calle con armas. La horca se levantó en la plaza y la hermandad de la Caridad y demás personas que en aquellos tiempos concurrían a estos actos reuniéronse a la puerta de la cárcel, formándose la procesión, a la cual esta vez señalaron una carrera en extremo larga, dando la vuelta hasta San Pedro, calle de Almonas, San Andrés a volver a bajar la Espartería. El reo, subido en un jumento, iba dando muestras de contrición. Las doce estaban para sonar cuando llegaban a donde hoy está el Arco Alto, y las voces de perdón empezaron a resonar entre la apiñada muchedumbre, ávida, como siempre, de presenciar estos desagradables espectáculos.
No era el perdón lo que llegaba. La Chancillería de Granada, atendiendo las reclamaciones del Cabildo, mandaba suspender la ejecución. El pueblo en general, a quien interesaba el joven Luna, empezó a dar voces de júbilo, en tanto que la mayor parte de la nobleza veía con gran desagrado que no se vengaba tan pronto como debiera la muerte de un pariente y amigo, achacando este entorpecimiento a las grandes influencias del alférez mayor don Pedro de Córdoba, a quien suponían padre del delincuente. Éste regresó casi en triunfo a la Catedral, donde permanecería en tanto que se decidiese la competencia. Mas a las pocas noches desapareció de la iglesia, ignorándose su paradero mucho tiempo, hasta que al fin se supo su marcha a Flandes, donde abrazando el ejercicio de las armas se elevó por su valor y talento a la graduación de capitán.

Concluye la historia de Don Rodrigo de Vargas

Conocido por nuestros lectores el pajecillo Luna podemos reanudar la historia de don Rodrigo de Vargas. Encargado el racionero Cortés de la dirección de realizar la venganza que todos anhelaban, creyó que nadie sería tan a propósito como aquél que con gusto cumpliría su juramento de joven, y decidió escribirle una carta, a la cual contestó que vendría a Córdoba a mediados de la próxima Cuaresma, oferta con exactitud cumplida, quedando escondido en la casa del racionero.
Por este tiempo concedió el papa un jubileo plenísimo que todos se apresuraron a hacer, y un don Andrés de la Cerda, amigo verdadero de don Rodrigo, le aconsejó aprovechara la ocasión de descargarse de tantas culpas como lo abrumaban. Acogió con gusto el consejo, conviniendo en ir juntos a confesarse al día siguiente a la iglesia de los Carmelitas. Mas aquella tarde, viéndolo bajar por la calle de Pedregosa un negro esclavo del racionero Cortés avisó a éste y bien pronto se colocó en la reja para hablarle. Don Rodrigo se paró y dijo que al día siguiente pensaba hacer el jubileo, de lo que fingió alegrarse el malicioso cura, rogándole que en celebridad de su arrepentimiento lo convidaba a la noche siguiente para hacer colación juntos. Aceptó Vargas y marchose tan descuidado, en tanto que su enemigo convocó a las personas contra él confederadas para presenciar lo que allí había de suceder.

Cerda y don Rodrigo hicieron su jubileo. El primero vivía cerca de la casa del racionero y a ella se llegó el segundo antes de ir al convite, rogándole a su amigo, que lo esperaba en la puerta, que cambiase la capa por aquella noche, porque tenía necesidad de acudir a una cita después de tomar la colación y no quería ser conocido. Repugnolo don Andrés de la Cerda, mas al fin accedió al cambio y Vargas bajó la calle, deteniéndolo el racionero, que lo esperaba en su ventana.

Hízole entrar, pretextando hacerse tarde, y desde luego lo llevó a una estancia en que estaba la mesa dispuesta, señalándole como asiento el sillón que daba espalda a la puerta de otra habitación, en la cual se habían escondido el capitán Luna con todos los demás confederados contra aquel infeliz caballero. Éste, de buena fe, sentose, y estando en jovial conversación con don Pedro Cortés recibió un terrible golpe en la cabeza, asestado con un venablo por el pajecillo, a quien apenas vio, y que a pesar de la carrera hecha no olvidó el modo alevoso que tenía de quitar de enmedio a los que le estorbaban.
Don Rodrigo dio un terrible grito de "me han muerto", que, aunque confusamente, oyó desde su casa don Andrés de la Cerda; mas temeroso de que don Rodrigo hubiese hecho alguna de sus hazañas, complicándolo a él por el cambio de la capa, puso de testigos a sus criados de estar en su casa cuando oyeron la voz, y cerró su puerta para no intervenir en cosa alguna. Un matrimonio habitante en la casa frente a la del racionero también oyó el desaforado grito de la víctima, pero en su declaración no pudo fijar el sitio de donde había salido.
Muerto don Rodrigo sus asesinos y algunos de sus parientes recogieron la sangre posible en un cubo y con ella fueron manchando muchas esquinas de las calles, y aun se añade ser la idea señalar las casas donde habían sufrido alguna ofensa del muerto, como para significar estar vengada. El cadáver fue envuelto en su capa; pusiéronle los guantes, ciñéronle su espada y con sigilo lo llevaron a la calle del Baño, hoy de Céspedes, dejándolo tendido contra la pared como si estuviese dormido, tanto que don Pedro de Mesa declaró luego que viniendo del campo con más de veinte amigos vieron aquel hombre en el suelo y creyéndolo embriagado siguieron su marcha comentando los efectos de semejante vicio.
La señora ya viuda de Vargas, que a pesar de sus muchos desaciertos lo quería con exceso, estuvo toda la noche esperando, y viendo por la mañana que aún no había aparecido envió en cuanto amaneció a su criado a preguntar a don Andrés de la Cerda, quien le contó el cambio de la capa e indicó el punto a donde sospechaba hubiese ido. Siguió el criado sus pesquisas, encontrándose en la calle del Baño con el cadáver, cuya vista le produjo tal impresión que empezó a dar grandes gritos de quebranto, volviéndose en busca de don Andrés, quien acudió, y en unión de otros amigos y parientes resolvieron llevarlo a casa del primero, en tanto se preparaba a la desgraciada señora. Hízose así y de allí salió también el entierro, al cual asistieron, para disimular, cuantos habían intervenido en la muerte, menos el capitán Luna, de quien la tradición no vuelve a ocuparse.


Don Andrés de la Cerda y otros parientes de don Rodrigo pudieron descubrir cómo sucedió la muerte de don Rodrigo de Vargas, y dando cuenta a la Justicia, ésta dirigió sus actuaciones contra el racionero Cortés, don Juan de Córdoba, don Alonso de Aguilar, don Alonso Cervantes y otros, sufriendo todos cuatro veces el tormento decretado por los jueces pesquisidores mandados por el rey para seguir esta causa. El único que a fuerza de los dolores dijo alguna cosa fue el negro esclavo de don Pedro Cortés, el que un día amaneció muerto en su calabozo. El ama o criada sufrió nueve veces el tormento, quedando coja y manca, pero sin pronunciar una palabra que diese el menor indicio, por lo que su amo le señaló después una pensión vitalicia. A Cervantes lo maltrataron también mucho porque dentro de un bollo le encontraron un papel en que le aconsejaban sufrir y callar. Por último, el racionero fue reclamado de Roma y los otros de Madrid, donde permanecieron muchos años, y al cabo todos quedaron libres, siendo recibidos en Córdoba con grandes muestras de júbilo, pues si infame era el crimen no eran menos los muchos que se le imputaban al don Rodrigo.


Teodomiro Ramírez de Arellano y Gutiérrez de Salamanca