Spin offs: Semillas de conocimiento
Eva Sereno 17:29 - 13/05/2009
Son una alternativa de autoempleo para muchos jóvenes, y más en tiempos de crisis y de caída en generación de empleo. El interés por constituirlas se mantiene, las universidades siguen destinando recursos a este fin y se plantean entrar directamente en su accionariado. En España se retoma el pulso de su creación y se alcanzan ya niveles cercanos a las medias europeas y estadounidenses. Pero no todas las iniciativas pueden convertirse en 'spin-off'.
En tiempos de crisis, el ingenio aflora y la necesidad de crearse su propio empleo es más acuciante. Una de las alternativas para los jóvenes universitarios es constituir su propia empresa y, dentro de esta opción, se encuentran las spin off o también llamadas semillas por ser sociedades empresariales que, al constituirse, tienen pequeñas dimensiones y luego crecen hasta hacerse grandes. Son entidades que surgen de la investigación realizada en el seno de una empresa, con lo que se da paso a otra sociedad empresarial vinculada a la primera, o en las universidades, y que dan como fruto un nuevo producto o tecnología que puede ser producido y comercializable.
En los últimos años, la creación de empresas spin off demostraba una ligera caída generalizada en el ámbito universitario. Según los últimos datos disponibles de la red OTRI correspondiente a su informe de 2008, en España en el año 2007 se crearon 120 spin off frente a las 143 que se constituyeron en 2006, lo que refleja una disminución del 16,1 por ciento. Sin embargo, el interés por su creación se mantiene y "no es un problema de crisis. En el caso de la Universidad de Zaragoza, lo que estamos intentando hacer es apostar más por la calidad que la cantidad. Profundizamos más en su modelo de negocio y empresa, en su estructura económica, y eso hace que un apoyo más importante suponga que no hay tantas empresas que se crean", según indica José Ramón Beltrán, vicerrector de Investigación de la Universidad de Zaragoza.
"El número de iniciativas que se presentan sigue siendo equivalente y continúa habiendo bastantes investigadores que quieren valorizar sus resultados de investigación en una empresa. En nuestra universidad no hay una relación clara entre crisis y creación de spin off. Más bien diría lo contrario. Hay una parte de los alumnos que se está planteando más seriamente autoemplearse a través de una empresa de este estilo y es ahí donde tenemos que hacer una política más intensa, en los emprendedores que no son investigadores de la universidad, sino alumnos que trabajan en nuestros laboratorios y que están haciendo la tesis". Una tendencia que se empieza a notar en la composición de las spin off, ya que comienza a haber en ellas menos presencia de personal investigador de las universidades.
Requisitos a cumplir
En España, la creación de spin off se va asentando poco a poco. En el año 2000 se contabilizaban 18 empresas de estas características, y si trasladar y transferir el conocimiento de la investigación a la sociedad era una asignatura pendiente en el país, hoy en día las distancias se han acortado y la media de creación de spin off en las universidades españolas es de 2,4 empresas por universidad.
Una cifra que se sitúa por encima de la media europea, fijada en 1,6, y cerca de la media de Estados Unidos, que es de 2,9. Pero no todas las iniciativas pueden ser spin off y a la hora de su elección se deben cumplir una serie de requisitos "porque si no estás haciendo una competencia desleal con respecto a otros ámbitos". En este sentido, puntos a favor son el hecho de que se ponga en valor algún resultado de investigación concreto a través de una patente o licencia de transferencia tecnológica o que se realicen servicios de alto nivel tecnológico con equipamiento específico.
Siguiendo los criterios de selección, es habitual que no todas las propuestas que se presentan lleguen a serlo y que en cada universidad española se creen entre 1 y 5 empresas semilla de media. Por ejemplo, en la Universidad de Zaragoza, desde que se puso en marcha el programa de spin off en el año 2004, se han creado 21 empresas, presentado 57 proyectos empresariales, generado 85 puestos de trabajo y el "objetivo es llegar a 30 spin off", según indica José Ramón Beltrán. Unas cifras que sitúan a la universidad zaragozana en una posición media en España en la creación de este tipo de empresas, siendo Cataluña, Valencia y País Vasco, las comunidades autónomas en las que más spin off se constituyen.
Los recursos que se destinan a la atención de las propuestas de este tipo de empresas se siguen manteniendo, aunque "conforme el programa crezca, habrá que pensar en hacer un poco más de retorno con el fin de sustentar la calidad y que los empleos que se generen sean estables y sólidos. Es importante que el tejido social mejore con este tipo de iniciativas". En este sentido, desde la Universidad de Zaragoza se sigue apostando por el programa de spin off y "estamos empezando a firmar convenios de colaboración con estas empresas para que la universidad bien forme parte del accionariado o bien se pueda valorar el uso de instalaciones o elementos dentro de la propia universidad que ayuden a la empresa y den un valor tecnológico añadido".
Iniciativa generalizada
La entrada en el accionariado de las spin off es una iniciativa que se plantea de forma general en las universidades españolas, sobre todo, una vez entre en vigor el anunciado decreto de empresas de base tecnológica y spin off por el que se contempla que las instituciones se consorcien con las empresas que se crean. Pero el objetivo de esta participación "no es el retorno económico, sino el apoyo a emprendedores y jóvenes". Y es que, además, el retorno no es habitual en estas empresas al estar en fase de desarrollo.
Para continuar con ese apoyo a las empresas semilla, se pone en marcha la VI Convocatoria del programa spin off. La Universidad de Zaragoza ha querido especialmente promover el espíritu emprendedor entre sus alumnos. Para ello, nada mejor que un árbol de las ideas para que los estudiantes dejen constancia en sus hojas de sus ideas empresariales.
Compañías de servicio a domicilio, de panadería y prensa, envases que tengan aromas según el material del que estén fabricados, crear implantes cibernéticos para potenciar el ser humano, construir máquinas robotizadas o realizar viajes virtuales por el mundo para las personas que no pueden viajar son algunas de las ideas propuestas. ¿Serán las próximas spin off?
Eva Sereno 17:29 - 13/05/2009
Son una alternativa de autoempleo para muchos jóvenes, y más en tiempos de crisis y de caída en generación de empleo. El interés por constituirlas se mantiene, las universidades siguen destinando recursos a este fin y se plantean entrar directamente en su accionariado. En España se retoma el pulso de su creación y se alcanzan ya niveles cercanos a las medias europeas y estadounidenses. Pero no todas las iniciativas pueden convertirse en 'spin-off'.
En tiempos de crisis, el ingenio aflora y la necesidad de crearse su propio empleo es más acuciante. Una de las alternativas para los jóvenes universitarios es constituir su propia empresa y, dentro de esta opción, se encuentran las spin off o también llamadas semillas por ser sociedades empresariales que, al constituirse, tienen pequeñas dimensiones y luego crecen hasta hacerse grandes. Son entidades que surgen de la investigación realizada en el seno de una empresa, con lo que se da paso a otra sociedad empresarial vinculada a la primera, o en las universidades, y que dan como fruto un nuevo producto o tecnología que puede ser producido y comercializable.
En los últimos años, la creación de empresas spin off demostraba una ligera caída generalizada en el ámbito universitario. Según los últimos datos disponibles de la red OTRI correspondiente a su informe de 2008, en España en el año 2007 se crearon 120 spin off frente a las 143 que se constituyeron en 2006, lo que refleja una disminución del 16,1 por ciento. Sin embargo, el interés por su creación se mantiene y "no es un problema de crisis. En el caso de la Universidad de Zaragoza, lo que estamos intentando hacer es apostar más por la calidad que la cantidad. Profundizamos más en su modelo de negocio y empresa, en su estructura económica, y eso hace que un apoyo más importante suponga que no hay tantas empresas que se crean", según indica José Ramón Beltrán, vicerrector de Investigación de la Universidad de Zaragoza.
"El número de iniciativas que se presentan sigue siendo equivalente y continúa habiendo bastantes investigadores que quieren valorizar sus resultados de investigación en una empresa. En nuestra universidad no hay una relación clara entre crisis y creación de spin off. Más bien diría lo contrario. Hay una parte de los alumnos que se está planteando más seriamente autoemplearse a través de una empresa de este estilo y es ahí donde tenemos que hacer una política más intensa, en los emprendedores que no son investigadores de la universidad, sino alumnos que trabajan en nuestros laboratorios y que están haciendo la tesis". Una tendencia que se empieza a notar en la composición de las spin off, ya que comienza a haber en ellas menos presencia de personal investigador de las universidades.
Requisitos a cumplir
En España, la creación de spin off se va asentando poco a poco. En el año 2000 se contabilizaban 18 empresas de estas características, y si trasladar y transferir el conocimiento de la investigación a la sociedad era una asignatura pendiente en el país, hoy en día las distancias se han acortado y la media de creación de spin off en las universidades españolas es de 2,4 empresas por universidad.
Una cifra que se sitúa por encima de la media europea, fijada en 1,6, y cerca de la media de Estados Unidos, que es de 2,9. Pero no todas las iniciativas pueden ser spin off y a la hora de su elección se deben cumplir una serie de requisitos "porque si no estás haciendo una competencia desleal con respecto a otros ámbitos". En este sentido, puntos a favor son el hecho de que se ponga en valor algún resultado de investigación concreto a través de una patente o licencia de transferencia tecnológica o que se realicen servicios de alto nivel tecnológico con equipamiento específico.
Siguiendo los criterios de selección, es habitual que no todas las propuestas que se presentan lleguen a serlo y que en cada universidad española se creen entre 1 y 5 empresas semilla de media. Por ejemplo, en la Universidad de Zaragoza, desde que se puso en marcha el programa de spin off en el año 2004, se han creado 21 empresas, presentado 57 proyectos empresariales, generado 85 puestos de trabajo y el "objetivo es llegar a 30 spin off", según indica José Ramón Beltrán. Unas cifras que sitúan a la universidad zaragozana en una posición media en España en la creación de este tipo de empresas, siendo Cataluña, Valencia y País Vasco, las comunidades autónomas en las que más spin off se constituyen.
Los recursos que se destinan a la atención de las propuestas de este tipo de empresas se siguen manteniendo, aunque "conforme el programa crezca, habrá que pensar en hacer un poco más de retorno con el fin de sustentar la calidad y que los empleos que se generen sean estables y sólidos. Es importante que el tejido social mejore con este tipo de iniciativas". En este sentido, desde la Universidad de Zaragoza se sigue apostando por el programa de spin off y "estamos empezando a firmar convenios de colaboración con estas empresas para que la universidad bien forme parte del accionariado o bien se pueda valorar el uso de instalaciones o elementos dentro de la propia universidad que ayuden a la empresa y den un valor tecnológico añadido".
Iniciativa generalizada
La entrada en el accionariado de las spin off es una iniciativa que se plantea de forma general en las universidades españolas, sobre todo, una vez entre en vigor el anunciado decreto de empresas de base tecnológica y spin off por el que se contempla que las instituciones se consorcien con las empresas que se crean. Pero el objetivo de esta participación "no es el retorno económico, sino el apoyo a emprendedores y jóvenes". Y es que, además, el retorno no es habitual en estas empresas al estar en fase de desarrollo.
Para continuar con ese apoyo a las empresas semilla, se pone en marcha la VI Convocatoria del programa spin off. La Universidad de Zaragoza ha querido especialmente promover el espíritu emprendedor entre sus alumnos. Para ello, nada mejor que un árbol de las ideas para que los estudiantes dejen constancia en sus hojas de sus ideas empresariales.
Compañías de servicio a domicilio, de panadería y prensa, envases que tengan aromas según el material del que estén fabricados, crear implantes cibernéticos para potenciar el ser humano, construir máquinas robotizadas o realizar viajes virtuales por el mundo para las personas que no pueden viajar son algunas de las ideas propuestas. ¿Serán las próximas spin off?
fuente: © 2007 Ecoprensa S.A.
Hola
ResponderEliminarMi nombre es Herlaynne Segura. Soy académica de Medellín y Colombia y estoy estudiando el tema del Spin Off ya que nos interesa incorporarlo en la Universidad de Antioquia.
EStaría muy agradecida si me indica dónde puedo leer de este protocolo de cómo llevar a cabo un spin off
Respecto a la información que me comentas tan sólo puedo decirte que la he sacado de la siguiente dirección:
ResponderEliminarhttp://ecoaula.eleconomista.es/primer-empleo/noticias/1243381/05/09/Spin-offs-Semillas-de-conocimiento.html
el hecho de colocar la misma, así como cualquier otro tipo de información es por si puede serle útil a cualquier persona.
Nuevamente me pongo en contacto contigo por si la información que ahora te traslado puede serte util para lo que preguntabas:
ResponderEliminarhttp://www.tecnociencia.es/especiales/spin_off/1.htm
en esta dirección creo que puedes ampliar lo que preguntas.
un saludo.
Muchas gracias por responder a mi inquietud. Todo lo que tenga que ver con el tema me sirve montones.
ResponderEliminarSaludos,
Herlaynne Segura