sábado, 20 de mayo de 2023

SIN TÍTULO

 

Se sintió el dueño final de un sueño final

postrada su cabeza desnuda,

en una deshilachada almohada carmesí,

de diminutas conversaciones perdidas

entre las cicatrices purulentas

de descascarilladas y húmedas paredes,

sobre las que el tiempo,

(inexcusable compañero

de las horas envasadas

en delicadas cajas de acero pulido),

ha estampado cuidadoso su lento latir

formando hermosas palabras,

con la amante perfección

del maestro impresor

que sueña con crear,

el vocablo perfecto donde describir

la desnuda apariencia de la soledad,

y..., las guardaba distraídamente,

de forma rutinaria

con la eficaz diligencia

del funcionario perfecto,

en pequeños cartuchos de papel de plata,

enlatados en las ondas mínimas del sonido dilatado

por el eco repentino del grito atormentado,

que el mar del norte, lanza cada día,

con la furia de mil caballos salvajes

contra las afiladas rocas de los acantilados.

Se sintió dueño

de una mirada evasiva,

de un recuerdo que no tuvo,

del repentino rozar

con una gota de luz

negligentemente esparcida

sobre un charco desnudo de agua,

del peculiar graznido de los cuervos

envueltos en piel humana

y corrió por campos de heno

recién cosechados

hiriendo sus pies

encadenados a la tierra.

Se sintió dueño de nada,

y un húmedo escalofrío,

recorrió su espalda

con dedos presurosos

entre sus vertebras cansadas,

y olvidó que el olvido,

es silencio,

que el rematar de las esquinas,

atrapa los dedos de los olvidados,

en la fina línea del amanecer

con la que el alba,

restaura sigilosa,

el malherido bramido

de los pasos apresurados de quienes recorren,

las apenas perceptibles calles adoquinadas

donde se pierden los pensamientos,

donde se humedecen los resquebrajados labios de los inocentes

y ciegan los ojos anochecidos

hasta llegar a impersonales hornacinas

en los que dejar descansar,

el divagador ruido nocturno

de una pálida ciudad enferma

mientras sus cuerpos de papel,

son tragados por desdentadas bocas

de acero, cristal y hormigón.


2023 @mado

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